La historia del transporte aéreo hasta llegar al actual sistema de transporte internacional de mercancías comenzó en 1782, cuando los hermanos Jacques y Joseph Montgolfier inventaron el primer globo aerostático.
Evolución del transporte aéreo y de las empresas de transporte internacional
El primer avión del mundo fue obra de otros hermanos, los Wright, ya en el siglo XX. Durante un par de décadas los cada vez más perfectos globos y zeppelines compitieron en igualdad de condiciones con los aviones. El accidente del Hindenburg en 1937 marcó el declive de este medio de transporte, cuando en pleno rearme de las potencias europeas, previo a la Segunda Guerra Mundial, los aviones mejoraron su autonomía, su operatividad y su capacidad de carga.
Tras la Segunda Guerra Mundial, ya existían aviones tirados con motor de reacción y capaces de adquirir una velocidad de más de 500 kilómetros por hora. Entre medias, se habían ido logrando pequeños hitos en la evolución del transporte aéreo: en 1916 un avión comercial recorrió a más de 2.000 kilómetros de altura la cordillera de los Andes, en Sudamérica. Tres años después, un avión logró recorrer la distancia entre Londres y París, y en ese mismo año 1919 se logró el primer vuelo transcontinental, entre Canadá e Irlanda.
El transporte internacional de mercancías en la actualidad
En pleno siglo XXI, todos los países del mundo cuentan con aeropuertos y están conectados por rutas de todo tipo de distancia y coste. Los pasajeros, con el boom del turismo, utilizan el avión en sus periodos vacacionales para disfrutar de días de asueto en otros países y las mercancías viajan cada vez más lejos por el aire.
Mientras que el barco es idóneo para el transporte de mercancías baratas y pesadas, el avión se ha convertido en el medio de transporte predilecto para enviar productos de alto coste o de recepción urgente.