La digitalización llega a todos los sectores y, el transporte de mercancías, no es ajeno a ello. El CMR electrónico es una de las novedades que permite reducir el papeleo necesario para el porte de carga. Este sistema cuenta con toda la seguridad jurídica de la versión en papel.
¿Qué es el CMR electrónico y para qué sirve?
El CMR electrónico, o e-CMR, es una versión en formato digital del Convenio sobre el Contrato de Transporte Internacional de Mercancías por Carretera (CMR). Este convenido es un acuerdo internacional que sirve para establecer los términos y condiciones del transporte de mercancías por carretera entre países que son signatarios del mismo.
El e-CMR o CMR electrónico, se basa en la tecnología para crear, transmitir y almacenar información útil asociada al transporte de mercancías para llega para simplificar todo este proceso. Esta tecnología evita al transportista cargar con los papeles de porte y está implantado en la mayor parte de Europa.
Fue en el año 2008 cuando se aprobó su uso en la asamblea de la ASTIC (Asociación Internacional de Transporte por Carretera) celebrada en Ginebra. En España hubo que esperar hasta junio de 2011 para que su ratificación apareciera en el BOE y ofreciera cobertura legal a este nuevo método de ratificar la existencia de un contrato de transporte.
Uno de los puntos más importantes en el CMR electrónico es la utilización de firmas digitales y otros mecanismos de seguridad para validar la información, garantizando la seguridad del documento. Por ejemplo, la obligatoriedad del uso de una firma electrónica por parte de todos los implicados en este proceso. Existen varias opciones para ello:
- Firma automática: Se emplea el sello de la empresa mediante certificado digital. Es un proceso semiautomatizado que simplifica el trabajo en los transportes regulares.
- Firma biométrica: Se trata de la realización de una rúbrica digital sobre una pantalla táctil. Es uno de los métodos más empleados para garantizar las entregas.
Sin duda, supone un gran avance para los transportes internacionales por carretera. Además, aporta mayor información a todas las partes implicadas en el movimiento de la carga.
Los primeros usos de esta tecnología
Aunque no pueda ser considerado un CMR en su definición más pura, esta tecnología lleva varios años aplicándose en el reparto de mercancías. En los envíos de paquetería de comercio electrónico el uso de documentos digitales está a la orden del día. Gracias a ello el repartidor se evita contar con todos los acuses de recibo de un solo turno en papel.
Mediante un dispositivo electrónico almacena los datos de entrega y los vuelca de manera instantánea a la compañía de reparto y la empresa vendedora. La aplicación y el formato que se emplea es muy similar al sistema de CMR electrónico de los portes por carretera.
La primera carga internacional usando solo CMR digital
La primera carga internacional que se desplazó utilizando esta carta de porte fue en el año 2017. Un camión refrigerado transportó una carga de naranjas desde Huelva a la localidad de Perpignan en Francia.
La ASTIC junto a sus homónimas francesa y española se encargó de coordinar este flete para demostrar la idoneidad y comodidad que supone el empleo de esta nueva tecnología. Desde esta fecha su uso no para de crecer y, cada vez, los transportistas requieren de menos documentación a bordo.
Grandes ventajas de la carta de porte digital
Apostar por esta tecnología para el traslado de mercancías aporta una serie de ventajas significativas para todos los actores implicados en el movimiento gracias a la carta de porte digital:
- Ahorro de costes: Se calcula que el formato digital puede suponer hasta un 70 % de ahorro en documentación y tiempos de gestión.
- Seguimiento: La carga está controlada en todo momento, se puede ubicar su posición y controlar el estado de los procesos al marcar los diferentes pasos como la carga o la descarga. Además, se pueden abrir incidencias como la avería del camión o retenciones de tráfico.
- Trazabilidad: Se trata de un solo documento que pasa por todos los encargados de manipular la carga. Esto supone un registro fiable de los movimientos y de la persona encargada de realizar cada uno de ellos.
- Seguridad legal: El soporte electrónico cuenta con entidad jurídica y es un elemento válido para todo tipo de trámites con administraciones o aseguradoras.
- Organización: Toda la documentación relacionada con la carga aparece registrada y ordenada en el terminal que lleva el transportista. Esto facilita los diferentes puntos en los que sea requerido a lo largo de la ruta como aduanas o controles policiales.
- Documentos adjuntos: La aplicación destinada a este proceso permite agregar documentación complementaria relacionada con el vehículo, el conductor o las normas de calidad de la mercancía. Todo ello agiliza los procesos y ofrece una información más completa.
- Almacenamiento seguro: Los documentos se archivan de manera digital guardándose durante largos periodos de tiempo (al menos cinco años) evitando que se pierdan o deterioren.
- Acceso desde cualquier lugar: Pueden consultarse de manera sencilla desde cualquier lugar con una simple clave de acceso. Tanto los que están en activos como los ya archivados.
¿Cómo implementar el CMR electrónico?
Introducir este sistema en la empresa resulta cómodo y sencillo. Mediante una API se puede implementar a la base de datos para facilitar las operaciones logísticas. Gracias a ello, el CMR se genera de manera automática al crear una orden de transporte.
Desde el software de Planificación de Recursos Empresariales o ERP y a través de una API sólida y bien diseñada, se emite una orden desde el ERP para reflejar la información en el e-CMR.
El CMR electrónico es un avance que cuenta con grandes ventajas para la industria del transporte terrestre. Toda la documentación viaja de manera ordenada y segura en un dispositivo digital que vuelca información sobre el proceso en tiempo real.
En resumen, la implementación del e-CMR no solo significa decir adiós al papel, sino también a dar la bienvenida a una logística más eficiente y conectada.
