El transporte internacional de mercancías es uno de los fundamentos sobre los que pivota el comercio internacional. De hecho, solo el transporte de mercancías mueve en el mundo alrededor de 300.000 millones de dólares. En una economía globalizada como la que vivimos, las empresas de logística son una buena apuesta de inversión y un engranaje comercial esencial.
Datos curiosos sobre el transporte de mercancías:
– En primer lugar, una estadística que mucha gente desconoce es que el 90% del transporte mundial se realiza a través de la vía marítima. Ello explica que del top ten de navieras, el 100% sean de potencias marítimas o de emporios comerciales centrados en grandes puertos.
– Además, comparado con los aviones o los coches, el impacto de los buques de mercancías al medio ambiente es proporcionalmente menor. Y esto es así por la concentración de los viajes y de la carga. Mientras que un avión gasta gran cantidad de energía transportando una mercancía pequeña, un buque portacontenedores podrá cargar 100 o 1.000 veces más carga, ahorrando en emisiones.
– La cantidad de mercancías que un barco puede transportar se sale de cualquier escala. Tanto es así que el mayor barco portacontenedores del mundo puede transportar 745 millones de plátanos en su seno, es decir, un plátano para cada habitante de Europa y Norteamérica.
La clave del éxito del comercio mundial es marítima
Así, al poder cargar gran cantidad de materiales (ya sean materias primas o productos acabados) el coste es sensiblemente inferior al del transporte ferroviario o por carretera. Por ejemplo, el coste de transportar una bicicleta por mar es de media de 10 dólares.
Así, el transporte marítimo se convierte en clave del éxito del transporte internacional de mercancías. Las grandes agencias de transporte buscan la expansión de su negocio en el mar, abrir factorías en grandes puertos y controlar las rutas comerciales, conectando los centros de producción y de consumo.
