El mercado francés es una gran opción para la venta de productos españoles. Las exportaciones hacia el país galo se mantienen al alza y ya suponen más del 15 % del total. Esto se traduce en un mercado de más de 38.000 millones de euros. Un espacio muy apetecible para cualquier empresa. Para exportar de España a Francia es importante conocer los requisitos y aplicar una serie de prácticas que garanticen su funcionamiento.
Requisitos para exportar de España a Francia
Las exportaciones a Francia se encuentran regidas por el tratado de libre circulación de mercancías de la Comunidad Europea. Esto supone una mayor facilidad para el traslado de los productos frente a terceros países. Esto es especialmente relevante para comercios pequeños que pueden ver en el país vecino una oportunidad de crecer y expandirse.
El principal requisito con el que se encuentra la compañía es la obligación de realizar un correcto seguimiento de la mercancía. Esto supone declara los bienes, destino y valor monetario de manera mensual en aduanas. Para realizar esta operación es necesaria la siguiente documentación:
- Identificación de la empresa mediante el registro mercantil.
- Declaración de importación, esta documentación incluye las certificaciones sanitarias, tránsito, personas y empresas involucradas y el certificado de inspección en origen.
- Otros elementos en función del tipo de mercancía que se transporta.
Para lograr realizarlo de manera adecuada es importante contar con un socio logístico adecuado. Puede encargarse de realizar la tramitación y asegurar el correcto cumplimiento de la documentación y la legislación del país de destino.
6 consejos prácticos para exportar a Francia
Para llevar a cabo esta logística internacional de manera eficiente es importante poner en práctica una serie de consejos como los siguientes:
- Los productos más demandados son las piezas de automoción y agroalimentarios, pero es un mercado en constante crecimiento. Además, los productos farmacéuticos no paran de ganar importancia.
- Revisar la normativa interna del país para el producto que se exporta. Francia cuenta con una regulación más específica que la de la UE para la mayoría de artículos, especialmente en el ámbito sanitario.
- Contar con socios locales es clave para darse a conocer en este mercado. Las alianzas son claves y acertar en ellas supone un salto cualitativo para establecerse en el país.
- Contar con conocimientos de francés ayuda a transmitir una imagen de cercanía y confianza. Esto supone una ventaja competitiva que ayuda en la inmersión en este mercado.
- A largo plazo es posible establecerse como una tienda propia que permite una venta directa en el país.
- Apostar por una logística eficiente permite mantener unos costes bajos, el principal atractivo de los productos españoles en el mercado francés.
Exportar de España a Francia implica llevar a cabo una serie de requisitos que resultan sencillos, pero imprescindibles. El mercado galo es una gran oportunidad para las pequeñas empresas si cuentan con el socio adecuado.
