La flota de vehículos es uno de los aspectos clave en cualquier empresa, especialmente, en aquellas dedicadas a la logística. De ella depende los tiempos del transporte de mercancías y el coste final de estos envíos.
El objetivo de las compañías es optimizar tanto la productividad como la eficiencia de estas flotas. Esto tendrá una importante repercusión en los ámbitos comerciales y económicos de la organización. Para ello, se deben minimizar los riesgos y maximizar su desempeño.
Gestión eficaz de flotas
Entre las pautas que se recomiendan para obtener una gestión más eficiente destacan las siguientes:
1. Elegir modelos de bajo consumo
El consumo de combustible puede llegar a suponer un 20 % del coste en la gestión de flotas. Por esta razón, es fundamental prestar a atención a este aspecto a la hora de adquirir un nuevo vehículo.
2. Revisar la flota de manera periódica
Una revisión periódica de los vehículos permite ahorrar costes y ofrecer más seguridad a los conductores. El correcto mantenimiento evita averías y prolonga la vida útil. Además, la flota consumirá menos combustible y emitirá menos emisiones de CO2.
3. Usar herramientas de software
Las herramientas informáticas ayudan a estudiar las mejores rutas de transporte. Reducen el kilometraje necesario para llegar al destino, lo que mejora los costes y disminuye el desgaste del vehículo.
4. Emplear sistemas de GPS
Los sistemas de GPS permiten comprobar que los conductores siguen la ruta establecida. Además, ofrecen una comunicación fluida con la central de gestión e informaciones a tiempo real.
5. Establecer programas de incentivos
Una buena idea puede ser la creación de un sistema de recompensas para aquellos conductores que cumplan ciertos criterios. Por ejemplo, premiar a los que tengan un mejor consumo medio o que cumplan los tiempos de entrega, etc.
Cómo fijar metas efectivas en la gestión de flotas
– Calcular rutas eficientes. Diseñar recorridos con el mínimo kilometraje y la mejor relación tiempo-coste. Esto mejora la eficiencia operativa y permite un mejor uso de los vehículos.
– Planificar la oferta. Es necesario calcular cuántos vehículos serán necesarios para cumplir con la demanda y horarios. De esta forma, se cumplirán los plazos y no habrá problemas de suministro.
– Estructurar los servicios. Estudiar las jornadas de trabajo de cada conductor para que cumplan con las condiciones del convenio. Es necesario cuadrar los horarios para que no haya problemas de solapamiento o exceso de horas. Tiene que haber conductores suficientes para cubrir los servicios de la empresa.
– Asignar el personal. Hay programas que ayudarán a programar el personal necesario para cada jornada de trabajo. De esta forma, se cumplirán las condiciones estructurales y no habrá problemas de previsión.
– Gestionar la operación. No hay que olvidar las actividades de control y administración de las compañías de transporte. Es vital gestionar las incidencias, las recogidas, las entregas, el seguimiento y todos los aspectos fundamentales de estas empresas.
Todas estas medidas tienen una repercusión directa en la gestión de vehículos empresariales. Permiten a las empresas contar con una flota más eficiente, que resulta en menores gastos y clientes más satisfechos.